Todo está negro, ser positivo no resolverá las cosas, estoy condenado al dolor eterno, pero hay un punto a favor, puedo detener el dolor cuando yo quiera, solo necesito un poco de valentía y hacer que la gente me odie. Ser egoísta... lo dudo.

Obligación y sufrimiento

Me pongo a pensar y me reflejo en situaciones desagradables para mi, siento que no quiero nada, que solo quiero desaparecer, sin embargo de nuevo aparecen los mismos culpables de la historia, que me obligan a ser, y yo no quiero, me hace mal, es una sensación incómoda, algo que me hiere el alma y me corta las alas...

No quiero esta presión, pero no es que sea flojera o algo así, son las pocas ganas de existir, de conocer. Tengo miedo, esa es la verdad, cometí errores por dejarme manipular (otra vez), y pagaré por ser idiota... Soy un completo inútil que nadie comprende, NADIE, sin excepciones.

No estoy hecho para la vida, ni para existir, no sé que cosa me podría pasar para que cambiara, solo quería un rayo de luz, pero la verdad todo es negro, y estoy seguro de que no hay esperanza, solo lo sé, es eso lo que tanto me deprime y me priva de vivir y existir, de ser.

Conclusión después de abandonar

Me han dicho que querían ser mis amigos, o quizás imaginé esa parte, pero eso no da motivo para dejar de hablarle a alguien que te escuchaba y que ocupaba su tiempo, tratando de caer bien a la gente. 

Quizás estoy siendo paranoico otra vez, cuatro años de terror no se olvidan de un día para otro, de igual forma me sorprende mi capacidad de aguantar la soledad, sin necesitar a nadie, fui llevado al limite... 

Tal vez esa es la razón principal de aislarme, luego de haber hecho amigos, luego de pasar tiempo con gente, reír, llorar, fumar o drogarse; no me duele alejarme, porque siempre estuve lejos, sin darme cuenta, ellos creían que era su amigo, pero al final solo estaba encajando en el mundo de forma temporal, por eso al final no me importó si ellos pensaban si era su amigo o no.

No me importa.